Plato
sencillo donde los haya, no hay escusa para meterse en la cocina y disfrutar de
un maravilloso plato como este.
Ingredientes:
Solomillo
Un tarrito de guindas
Leche
1 cucharadita de harina de maíz
Sal
Pimienta
Aceite de oliva.
Preparación:
Primero que nada decir que en mi caso puse guindas rojas,
porque era lo que tenía en casa, pero
queda más llamativo si las ponemos rojas y verdes por eso de encontrarse
diferentes colores al corte.
Con la ayuda de un cuchillo no muy grande pero bien
afilado, hacemos un corte al solomillo en el centro de este, en el que
meteremos las guindas.
Salpimentamos y
sellamos bien por todos los lados en una cacerola bien caliente con un poquito
de aceite.
Cubrimos con la leche y volvemos a salpimentar bien el
líquido, dejando cocinar a fuego vivo en un principio y bajando a temperatura
media hasta que la carne esté cocinada, el solomillo no necesita de mucho tiempo.
Sacamos la carne, y batimos la salsa un poco con ayuda de la
batidora.
Disolvemos la cucharadita de harina de maíz en un poquito
de agua e incorporar a la cacerola, removemos, volvemos a meter la carne dándole
un minutillo mas de cocción.
Presentamos y a disfrutar.
¿Fácil verdad?