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23 enero 2011

Delicias de salmón con sabor a mar




Ayer pedí a Fófo que me hiciera algo especial, el sabe que me encanta el pescado, por lo tanto nos dimos un paseo por la pescadería y hoy se ha puesto manos a la obra.
Como siempre que se pone a crear, no me deja meter la nariz en la cocina, la espera ha merecido la pena, pues los olores que se escapaban eran realmente deliciosos y el resultado maravilloso.
Te invito a hacer esta receta porque disfrutaras muchísimo.

Ingredientes:
1 lomo de salmón fresco
1/4 de almejas
12 mejillones de buen tamaño
6 gambones
2 dientes de ajo
2 orejones
una ramita de perejil
medio vaso de vino blanco
un poco de whisky
media cucharadita de harina de maíz
cayena molida
aceite de oliva
sal

Preparación:
Ponemos una sartén al fuego fuerte con unas gotas de aceite, echamos los gambones y rociamos con un buen chorro de whisky dejamos hacer 1 minuto y retiramos, dejamos que temple. Con las cabezas, cascaras y líquido de esta cocción trituramos y pasamos por un colador, si es necesario añadimos un poco de agua y cocemos unos minutos y reservamos.
Abrimos los mejillones al vapor, cuando estén listos sacamos y reservamos el agua de la cocción en la cacerola.
En una sartén, con un chorrito de aceite freímos los ajos cortados en pequeñito, cuando comiencen a tomar color añadimos las almejas que tendremos previamente en agua fría y añadimos el vino blanco, tapamos, cuando comiencen a abrirse le añadimos la harina de maíz disuelta en un poquito de agua, agitamos y salpicamos un poquito de perejil picado, reservamos tapado.
Quitamos la piel y las espinas, partimos el lomo a la mitad, en cada parte colocamos tres mejillones, tres gambones y un orejón laminado, enrollamos fuerte con ayuda de papel films, creando una especie de caramelo, juntamos los extremos para que no se suelte, y metemos en la cacerola del agua de  los mejillones y dejamos cocer tres minutos.
Pasado este tiempo sacamos, dejamos que temple un poco y desliamos, ponemos en la junta de cada cilindro palillos con una separación de diez centímetros entre cada palillo, para facilitar que no se rompa al cortarlo y cortamos en rodajas, salpimentamos y pasamos a la plancha vuelta y vuelta, sin pasarse para que mantenga su jugosidad.

Presentación:
Ponemos una cama con la salsa de almejas, encima un par de medallones sin el palillo, regamos por encima con el jugo de los gambones, acompañamos con unos mejillones y unas poquitas almejas, salpicando con un poco de aceite de perejil, que se hace con un poco de aceite y perejil fresco muy picadito mezclado muy bien, y el plato está listo.


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