Ingredientes:
1 pollo
deshuesado y cortado en trozos
1 ½ vaso de
vino blanco
1 vaso de agua
1 cabeza de
ajos
1 cucharadita
de pimentón dulce
1 pimiento seco
1 cucharadita
de vinagre de manzana
12 granos de
pimienta negra
1 rebanada de
pan grande
2 hojas de
laurel
Aceite de oliva
sal
Preparación:
Echamos un buen chorro de aceite en una cacerola amplia y acercamos al
fuego, cuando coja calor echamos los ajos sin pelar y las hojas de laurel,
dejamos que dore un poco y agregamos el pollo previamente sazonado, si es
necesario se lo ponemos en dos tandas para que se dore bien, le echamos la
pimienta y el pimiento seco, cuando lo tengamos doradito le añadimos el vino y
cuando comience a hervir después de un par de minutos le agregamos el agua.
Por otro lado en una sartén con un poquito de aceite freímos la
rebanada de pan, pasamos a un mortero junto con un par de dientes que
sacamos de la cacerola limpios de piel y la carne del pimiento que también
habremos sacado, machacamos bien y agregamos medio vaso de agua mezclamos bien
y esparcimos por toda la cacerola, añadimos el pimentón y la cucharadita de
vinagre y mezclamos con cariño para que la carne no se rompa y dejamos
cocer hasta que la salsa espese un poquito.
Servimos acompañado de lo que más nos apetezca, yo en este caso de unas
patatitas huecas.