Un aperitivo ideal con el que sorprenderás a tus familiares
o amigos, por ese contraste dulce picante, muy sencillo y gratificante.
Ingredientes:
250 g de almendras crudas con piel
25 g de azúcar moreno
una cucharada de miel
una cucharadita de sal
la punta de una cucharilla de cayena molida.
Preparación:
Ponemos el horno en funcionamiento a 175º.
Cubrimos la bandeja de horno con papel vegetal y
reservamos.
Echamos la miel y la cayena en un cazo que pondremos al
fuego a temperatura media esperando que se derrita, en ese momento
incorporamos las almendras, retiramos
del fuego y removemos bien procurando que todas se impregnen, volcamos sobre la
bandeja que teníamos reservada, con un poco de paciencia extendemos bien de manera que no queden
montadas unas con otras y metemos al horno durante diez minutos más o menos,
pasado el tiempo sacamos del horno y dejamos enfriar un poco, mientras unimos en un cuenco el azúcar y la sal y removemos bien, echamos por encima de las almendras que aún estarán
tibias y mezclamos cogiendo cada punta del papel vegetal removiendo ligeramente, procurando que se recubran totalmente y ya tenemos nuestro
sugerente aperitivo.